El asesinato de Olof Palme: ¿caso resuelto?

Por Miriam Mata

En 1986, la muerte del ‘premier’ sueco conmocionó al país. El crimen no ha prescrito y la última línea de investigación señala a uno de los testigos

El 28 de febrero de 1986 un tiro por la espalda en pleno centro de Estocolmo no sólo terminó con la vida del  primer ministro Olof Palme , sino que acabó con la inocencia sueca. Quebrada la certeza de la sociedad casi perfecta, fruto del estado del bienestar y la socialdemocracia de los que Palme era su paradigma, el crimen sin resolver aún persigue a  Suecia.

El caso, sin embargo, podría estar a punto de resolverse. Y es que según informan los medios suecos la policía cree por fin saber quién mató a Olof Palme y “en un futuro próximo” ofrecerá nueva información al respecto. La última línea de investigación señala como magnicida al hasta ahora conocido como ‘hombre Skandia’, en referencia a la compañía en la que trabajaba. Identificado como Stig Engström, fue uno de los “primeros testigos” en aparecer en la escena del crimen.

Engström, un consultor publicitario en la compañía financiera y de seguros Skandia, abandonó su oficina a las 23.19 horas de aquel 28 de febrero de 1986 en el que Olof Palme era aesinado  en la misma calle tres minutos después, tras salir del cine con su esposa Lisbeth. Descartado inicialmente como el homicida, nuevas informaciones desvelan que participó en cursos de tiro, que frecuentaba círculos críticos con el primer ministro y que tenía acceso a armas, como la que se usó en el asesinato y que nunca fue hallada.

Así lo publica la revista sueca ‘Filter’ en un extenso reportaje del periodista Thomas Pettersson tras 12 años investigando el caso. Revela cómo Engström, quien se suicidó en el año 2000, fue investigado después de que su supervisor informara de su comportamiento sospechoso en el momento del asesinato. También trascendió que abandonó temporalmente su puesto de trabajo sobre las 21.00, un cuarto de hora antes de que Palme y su esposa entraran en el cercano Grand  Cinema.

Sin embargo, entonces no se sabía ni de su entrenamiento en armas en un club de tiro militar ni su acceso a ellas a través de un amigo y vecino que las coleccionaba, además de almacenar munición. Éste, también fallecido ya, tenía especial predilección por los revólveres americanos por su pasado militar en Estados Unidos, como la Magnum que se usó para asesinar a Palme y herir a su esposa.

Los detectives retomaron la investigación del ‘hombre Skandia’ la primavera del año pasado después de que Thomas Pettersson, quien publicará próximamente su investigación en el libro ‘El Asesino Improbable’, evidenciara diversos errores en la actuación policial que descartó a Engström, pese a que coincidía con la vaga descripción del sospechoso como autor del magnicidio.

Su ex esposa, que confirmó al diario ‘Expressen’ que ha sido interrogada por la policía en dos ocasiones durante el último año, relató como la vida de Engström dio un giro inesperado en los años posteriores al magnicidio. Empezó a beber y sus planes laborales “más glamourosos” tras ser despedido de Skandia no prosperaron. Se divorciaron en 1999 y un año después se suicidó. Pero ésta rechaza que sea el asesino. “Eso está fuera de cuestión. No era esa clase de persona, eso es seguro. Era muy cobarde, no haría daño ni a una mosca”, afirmó. Un amigo cercano, escribe Expressen, tampoco lo considera probable. Aunque afirma que si Engström, miembro del Partido Moderado, disparó “lo haría para impresionar a alguien”. Fuente El Mundo ES

[youtube https://www.youtube.com/watch?v=LaI-k34xnaA&w=560&h=315]

Entrada siguiente

( 3 PM ) RESUMEN DE NOTICIAS DE RADIO VIVA 24

jue May 24 , 2018
24 de Mayo de 2018 Donald Trump ha retirado su candidatura al Nobel de la Paz. No es que tuviera muchas posibilidades -el Comité Nobel tiene propensión a darle el […]

A %d blogueros les gusta esto: