Al menos diez personas murieron y más de 40 resultaron heridas el jueves en tres atentados consecutivos en la capital afgana, dos de ellos reivindicados por el grupo Estado Islámico (EI) y el tercero por los talibanes, según publica AFP.
Los atentados se produjeron en un contexto de aumento de la violencia en Kabul y en todo Afganistán, que en tres días arranca su campaña electoral para las presidenciales del 28 de septiembre.
La guerra se está cobrando un precio brutal en el país asiático, pese a la campaña dirigida por Estados Unidos para lograr un acuerdo de paz con los talibanes.
La rama afgana del yihadista EI reivindicó los dos primeros atentados.
La primera explosión se produjo alrededor de las 08H10 (03H40 GMT) cuando un terrorista suicida que iba en motocicleta se lanzó contra un autobús en el este de Kabul. Las imágenes mostraron a civiles correr en ayuda de los pasajeros heridos para sacarlos del autobús, entre ellos el cuerpo de un bebé.
Unos 30 minutos más tarde, una segunda explosión provocada por un artefacto disimulado en el mismo lugar de ese ataque segó la vida de civiles y de las fuerzas de seguridad. El tercer atentado, presuntamente dirigido contra un convoy militar, se produjo horas más tarde, también en el este de la capital.