Los argentinos votaban el domingo en unos comicios polarizados entre el conservador presidente Mauricio Macri que pelea por la reelección en un contexto recesivo y el kirchnerista Alberto Fernández, quien se perfila como favorito con su promesa de mejorar la situación social, según publica AP.
Los centros habilitados para la votación abrieron sus puertas a las 8 de la mañana (1100 GMT) y tenían previsto cerrar a las 6 de la tarde (2100 GMT). Se esperan los primeros resultados oficiales a las 9 de la noche (0000 GMT).
Foto: Twitter,@FedericoBlackB
Más de 33,8 millones de argentinos están habilitados para votar en las elecciones en las que se elegirán presidente y vicepresidente, gobernadores de tres provincias, jefe de gobierno de Buenos Aires, 130 diputados nacionales, 24 senadores nacionales y alcaldes regionales.
La victoria de Fernández que vaticinan las encuestas supondría el regreso del kirchnerismo al poder. El candidato compite acompañado de la expresidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner (2007-2015), quien desistió de pelear por la presidencia y lo eligió como cabeza de la fórmula del peronista Frente de Todos. Varios votantes se acercaron en hora temprana a depositar su voto en las urnas instaladas en la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional de Rosario – unos 300 kilómetros al noroeste de Buenos Aires-, que se habilitó como centro electoral.
Foto: Twitter, @martintetaz
Las elecciones en Argentina tendrán lugar en un contexto regional convulsionado por el estallido social en Chile, la crisis política en Bolivia y las recientes movilizaciones en Ecuador contra el aumento del combustible. Se celebrarán además de forma simultánea a las de Uruguay, donde la coalición oficialista de izquierda Frente Amplio no tiene asegurada su revalidación.
En los últimos tramos de la campaña electoral Fernández apuntó contra el presidente por el empeoramiento de la crisis que el país arrastra desde 2018 y Macri pidió a los argentinos más tiempo para revertir el deterioro y cuestionó las prácticas corruptas y autoritarias que achaca al kirchnerismo.