“Todos los miembros de la comunidad internacional deberían observar y respetar el embargo de armas de la ONU”, indicó un portavoz de Borrell en un comunicado, según publica la cadena DW.
El presidente de Turquía, el islamista Recep Tayyip Erdogan, recalcó este domingo el derecho de su país a ofrecer ayuda militar a Libia y rechazó las críticas al acuerdo de cooperación firmado con el Gobierno de Trípoli reconocido por la ONU.
“Si es necesario, ampliaremos la dimensión militar del acuerdo (con Libia) y evaluaremos todas sus posibilidades por mar, tierra y aire”, afirmó el presidente.
Esta declaración se produce después de que Turquía y el Gobierno del Acuerdo Nacional libio, con sede en Trípoli, firmaran en noviembre un documento que delimita las zonas de interés económico.

El pacto, que según la UE viola ley internacional, abre la puerta a que Ankara le suministre ayuda militar en el conflicto armado contra el mariscal Jalifa Hafter, que desde Tobruk controla gran parte del país.