Los cubanos en Miami siguen con preocupación las noticias provenientes de la isla que anuncian un recrudecimiento de la crisis económica que vive el país desde hace décadas, publica el Nuevo Herald.
Con la reducción de los subsidios venezolanos, más sanciones del gobierno de EEUU por su apoyo a Nicolás Maduro y una abultada deuda externa, Cuba pasa por una crisis de liquidez que ha obligado a su gobierno a comprar en el mercado internacional el combustible que Venezuela antes daba a precios subsidiados.
El aseo “nos ha estado faltando en el mes de enero. No vamos a tener todavía satisfecha la demanda ni en febrero ni en marzo pero esperamos que con varias medidas que se están adoptando a partir del mes de abril podamos ir estabilizando la producción de aseo por la industria y con ello la oferta a la población”, dijo la ministra de Comercio Interior de Cuba, Betsy Díaz Velázquez, a los medios estatales.
En Miami, la ciudad donde más cubanos residen después de La Habana, la noticia de un nuevo período de escasez se sigue con preocupación.
“Tengo a toda mi familia en Cienfuegos. Hace una semana tuve que enviarles un paquete con café, lentejas, garbanzos y otras cosas porque la situación cada vez está más mala”, dijo Lázaro Alberto Domínguez, un cubano que reside en Hialeah.
Domínguez relata que además de enviar $100 mensuales a su anciana madre en Cuba, tiene que preparar “de vez en cuando” paquetes con alimentos, medicinas y ropa.
“En Cuba no hay nada. Tú puedes tener dinero, pero las cosas no aparecen en las tiendas. El gobierno le echa la culpa de todo al bloqueo [embargo] pero en los hoteles no falta nada”, lamenta.
Por cada libra enviada a Cuba, Domínguez paga en agencias de envío $10 y la paquetería se recibe en menos de 15 días.