El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, nombró el miércoles (26-02-2020) al vicepresidente Mike Pence para dirigir la respuesta del país al nuevo coronavirus y aseguró que el país está “muy preparado” para afrontar la enfermedad que afecta ya a 41 países del mundo, publica la cadena DW.
“Voy a poner a nuestro vicepresidente Mike Pence a cargo”, dijo Trump en una rueda de prensa en la Casa Blanca.
“Mike trabajará con los profesionales y los médicos y todos los demás que están en el equipo”, añadió.
Trump trató de minimizar los temores de que el virus se extendiera ampliamente a través de Estados Unidos, pero dijo que estaba listo para hacer “lo que sea apropiado”, incluso si eso significaba destinar miles de millones de dólares extra que los demócratas han propuesto ante una eventual epidemia.
El mandatario había solicitado al Congreso a principios de esta semana 2.500 millones de dólares para luchar contra el virus.
“Estamos muy, muy preparados para esto, para cualquier cosa”, dijo.
Mientras tanto, las autoridades de Salud informaron que se han detectado tres nuevos casos de coronavirus en el país, elevando el recuento a 60.
En el Capitolio, los principales legisladores pidieron un gasto bipartidista que daría a los funcionarios federales, estatales y locales más recursos.
El líder demócrata del Senado, Chuck Schumer, reveló una propuesta de coronavirus de 8.500 millones de dólares.
El plan de 8.500 millones de dólares de Schumer supera en tres veces la petición de Trump.
Incluye 4.500 millones de dólares para el Departamento de Salud para contener el brote; 1.000 millones de dólares para desarrollar y fabricar una vacuna, 1.000 millones para ayudar a otros países y 2.000 millones más para reembolsar a los estados sus gastos.
El recuento de coronavirus en EE.UU. incluye a personas que viajaron de regreso de zonas de brotes en China o sus cónyuges; tres personas que fueron evacuado de la ciudad de Wuhan, en China central, y 42 americanos que eran pasajeros del crucero Diamond Princess y fueron evacuados por el gobierno federal a los EE.UU. desde que la nave atracara en Japón.
