Es la primera vez que el Comité de Libertad Sindical admite un caso contra el gobierno de Cuba, presentado por una organización sindical independiente dentro de la Isla.
La ASIC asumirá próximas acciones en defensa del derecho laboral en la Isla y las denuncias internacionales ante los organismos competentes
El Consejo de Administración de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) aprobó el informe del Comité de Libertad Sindical, CLS de ese Consejo, concerniente al caso distinguido con el número 3271, de la Asociación Sindical Independiente de Cuba, ASIC contra el Gobierno de Cuba.
El expediente señala al régimen de la isla por la violación al derecho fundamental a la libertad de asociación, de representación y de negociación colectiva, constituyendo un verdadero éxito de ASIC, en su lucha por la legítima representación de los trabajadores a nivel nacional e internacional (convenios internacionales Números 87; 98; y 135).
Fuera de la protesta que era de esperar del régimen cubano, todos los votos fueron favorables. Ninguno de los países amigos del castrismo en América Latina son miembros con derecho a voto en el Consejo.
El Consejo de Administración de la OIT, es el máximo organismo de dirección de esa organización, solo por debajo de la Conferencia Internacional del Trabajo.
Los voceros de todos los grupos censuraron firmemente el reiterado ardid del gobierno cubano, de solicitar la clausura del caso, “porque se trata de una investigación hecha en base a denuncias de personas que no son verdaderamente sindicalistas, financiadas desde el exterior, con fines políticos y no sindicales y que revela, la forma manipulada como el Comité de Libertad Sindical, tramita los casos cuando se tratan de países subdesarrollado”.
Esta infeliz afirmación entre otras cosas tuvo la “oportunidad” de proferirse cuando precisamente se están celebrando el 70 aniversario del Comité, por lo que ha recibido los mayores elogios de gobiernos, empleadores y trabajadores.

“Los actores sociales miembros de ese Consejo rechazaron los argumentos oficialistas y lamentaron que el Gobierno nunca haya implementado las recomendaciones que el Comité de Libertad Sindical, le viene exigiendo desde 2018, y por el contrario, permanece violando la libertad sindical al no reconocer legalmente a ASIC, para que esta pueda realizar con libertad sus actividades como legitima organización de los trabajadores. Así mismo, rechazaron unánimemente los insultos infundados del gobierno de Cuba contra el CLS”, señala el informe.
El documento aprobado coloca especial énfasis en demandar urgentemente al gobierno de Cuba, el cese de toda forma de presión, hostigamiento y arrestos arbitrarios contra los dirigentes sindicales y activistas independiente. Demandando el cese de la represión, identificando con nombre y apellidos todos los dirigentes y activistas del sindicalismo independiente que han sufrido la represión
ASIC estudia las próximas acciones, luego de esta victoria. Existe una gama de opciones que se analizaran minuciosamente.
Es la primera vez en los 70 años de existencia del CLS, que un caso contra el gobierno de Cuba es presentado por una organización sindical independiente dentro de la Isla. Hecho que, entre otros muchos elementos relevantes, muestra el coraje de los sindicalistas independientes en denunciar las violaciones con sus nombres y apellidos, desafiando la oscura mano de la represión oficial.
Una referencia histórica
En 1952 y 1956 la Federación Sindical Mundial (ya de inspiración soviética), presentó dos casos contra los gobiernos de turno. Desde 1961 a 1968, las quejas fueron presentadas por diversas organizaciones de trabajadores cubanos en el exilio. Caso anecdótico es que, en 1960, el Partido Copey del Distrito Federal de Venezuela presentó una queja que luego de admitida se rechazó bajo nuevos criterios de admisibilidad.

Desde 1983 hasta el 2003, fueron presentado cinco casos por las organizaciones sindicales internacionales, Confederación Internacional de Sindicatos Libres, CISOL, la Confederación Mundial de Trabajadores, CMT y la Central Latino Americana de Trabajadores, CLAT. Todos cerrados luego de algunos informes provisionales con recomendaciones formales que nunca fueron ni cumplidas ni supervisadas y que condujeron al cierre de los casos presentados.
Incluso en la queja 2258 del 2003, el Comité recomendó la designación de una Misión de Contacto Directo, que nunca fue activada por falta de invitación del gobierno, requisito formal para que este tipo de mecanismo se active. El caso murió de “inanición”.
El reto actual de ASIC y el GIRSCC es hacer que luego del éxito registrado hoy, lograr los mecanismos que aumenten la presión sobre el régimen, pasando por el requisito de la Misión de Contacto Directo y al continuar las violaciones como es de esperarse, acudir a otros mecanismos ms severos de control en la OIT. si sigue las violaciones del gobierno no solo de los derechos de los trabajadores sino también, a los mecanismos de control de la OIT.
Esta es la tarea que tenemos al frente, nada fácil por las oposiciones que hay que vencer, pero estamos seguro que la superaremos.
Resaltamos que se trata de la primera derrota abierta, sufrida por la dictadura en el marco de la OIT, propinada por una organización sindical independiente que arriesga todo, día tras día, en sus luchas al interior de la Isla, con el apoyo y asesoramiento del GIRSCC.
Con información de Iván Hernández Carrillo y OIT