Por Francisco Alemán de las Casas
El globo de las vacunas cubanas contra COVID 19, terminó de desinflarse.
Cuba no tienen un candidato vacunal que funcione, o sea, que la mentira de Abdala, Soberana 01, 02, Plus y Mambisa, se fue del aire.
El Gobierno de Cuba no recibió una licencia de uso de emergencia para sus vacunas contra el covid-19 por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS) y por tanto, los inventos de la isla, no se puede comprar a través del Fondo Rotatorio de la Organización Panamericana de la Salud, mecanismo por el que se suponía pudiera venderse y comprase las fallidas vacunas cubanas en cualquier país.
El 31 de agosto de 2021, el doctor Jarbas Barbosa, subdirector de la OPS, indicó que el organismo regional solo tiene permitido el comprar vacunas autorizadas, precalificadas o con autorización de uso de emergencia de la OMS. Ni Abdala, ni Soberana, ni Mambisa podrán ser adquiridas por otros países, bajo la aprobación internacional de la OMS. Fin de la mentira.
El fracaso de los candidatos vacunales cubanos ha sido tan grande, que ahora, lo que le van a poner a la gente en Cuba es una de las vacunas chinas, la Sinopharm.
El país asiático donó al menos 250,000 dosis de vacunas a Cuba, según dijo Ileana Morales Suárez, funcionaria del Ministerio de Salud, a la televisión cubana.
Pero esto es más raro todavía: la eficacia de la vacuna china Sinopharm es del 72 %. Y eso es lo que dicen los chinos, ¡vaya usted a saber si es verdad!
No sé si usted recuerda, pero, el régimen cubano aseguró hace poco que Soberana 01 tenía más de 92 % de eficacia, y que su hermanita siamesa, la vacuna Soberana Plus, superaba el 91 %.
Ah, y Abdala, otro de los candidatos vacunales cubanos, según el conteo del régimen, alcanzaba el 96% de efectividad en su tercera dosis.
Bueno, luego cambiaron de idea dejaron a Abdala en poco más del 92 %. Ya saben: ellos suben y bajan la efectividad de las vacunas según les parezca.
Pero, entendiendo que las vacunas cubanas, todas, según ellos, tienen más del 90 % de eficacia… ¿por qué es que deciden cambiar ahora de palo pa rumba e inocular una vacuna, la china, que tiene, según los chinos, apenas un 70% de eficacia?
¿A alguien más le parece que la mentira sobre el éxito de las vacunas cubanas es tan grande que ya no la pueden sostener y Díaz Canel y sus cuatreros han tenido que apelar a los chinos para detener la mortandad en Cuba, causada por el COVID 19?
Entonces, ¿para qué perdió Cuba tanto tiempo – y vidas y millones de dólares -, experimentando, no con uno, si con cinco candidatos vacunales, si al final tuvo que suplicar por ayuda a China para, en teoría, acabar con las altísimas tasas de contagios y muertes por coronavirus en la isla?
Ahora, porque, claro, para el régimen todos nosotros somos subnormales, nos dicen que en Cuba inoculará a su población con una o dos dosis de la vacuna china y con otra de las vacunas cubanas. Ya sabe, la que le toque de las cubanas: Soberana, Mambisa, Abdala, Plamiche o María Silvia. Total, todas han demostrado ser altamente erráticas para prevenir el coronavirus.
