No merece morir. Al menos, no por el asesinato de Luke Hoyer, de 15 años, o de Martin Duque, de 14, decidió el jueves un jurado de Broward después de deliberar siete horas.
Mientras se leía el veredicto, una recomendación de cadena perpetua por la muerte de Hixon, su hijo y su hija abandonaron la sala del tribunal.
La muerte de Hixon fue la primera prueba de la posibilidad de un veredicto dividido.
Sobre la evidencia, la fiscalía hizo su caso, el jurado encontró por unanimidad. Pero al menos un miembro del jurado, y todo lo que necesitó fue uno, fue persuadido por la petición de clemencia de la defensa, publica Sun Sentinel.
El pistolero de Parkland, Nikolas Cruz, quien confesó haber quitado 17 vidas en la escuela secundaria Marjory Stoneman Douglas el 14 de febrero de 2018, merece la piedad que no mostró cuando apretó el gatillo y acabó con las vidas de Hoyer y Duque, el jurado de cinco mujeres y siete los hombres decidieron sobre los dos primeros cargos.
Los veredictos fueron solo los primeros de 17, y queda por ver si la decisión se mantendrá para las víctimas restantes. Se necesitaría una recomendación de muerte en un solo caso para que Cruz sea un candidato probable para el corredor de la muerte de Florida.
Las personas que murieron el 14 de febrero de 2018 en la escuela secundaria frecuentemente fueron mencionadas por su nombre durante el juicio: Alyssa Alhadeff, 14; Scott Beigel, 35; Martin Duque Anguiano, 14; Nicholas Dworet, 17; Aaron Feis, 37; Jaime Guttenberg, 14; Christopher Hixon, 49; Luke Hoyer, 15; Cara Loughran, 14; Gina Montalto, 14; Joaquin Oliver, 17; Alaina Petty, 14; Meadow Pollack, 18; Helena Ramsay, 17; Alexander Schachter, 14; Carmen Schentrup, 16; y Peter Wang, 15.
Es poco probable que la decisión del jueves traiga un cierre real a cualquiera de los involucrados.
No devolverá las 17 vidas que se perdieron, los niños cuyo único delito fue ir a la escuela el día de San Valentín, o los maestros que intentaron salvarlos.
No eliminará las cicatrices de las víctimas que sobrevivieron al ataque con metralla alojada en la piel.
Foto: AP
Vía: Sun Sntinel