Johnny López de la Cruz siente que se asfixia. Encerrado en un camión con más de 100 prisioneros, apenas puede respirar.
Dentro del contenedor los reos se desesperan. Rompen a sudar. Varios se desmayan.
Algunos arrancan las hebillas de su cinturón militar para perforar el techo y que entre un poco de aire. Compran tiempo, pero la mayoría piensa que los fusilarán en cuanto lleguen a La Habana.
El viaje termina siete horas después. Los militares castristas abren las puertas.
Varios cuerpos inertes caen sobre el asfalto. Nueve presos han muerto en el trayecto, publica BBC.

Cuando a Johnny le toca salir, apenas puede saltar.
En “el camión de la muerte” no van los únicos prisioneros. En total, repartidos en varios vehículos, hay alrededor de 1.100 capturados.
Son los sobrevivientes de la Brigada 2506, un ejército de 1.400 jóvenes que horas antes fracasó en su intento de invadir Cuba, aplastados en Playa Girón por las fuerzas de Fidel Castro.
La mayoría son cubanos exiliados que, tras triunfar la revolución, fueron reclutados y entrenados por la CIA para derrocar al gobierno revolucionario de la isla.
Fidel Castro había llegado al poder dos años antes, al vencer el 1 de enero de 1959 al gobierno golpista de Fulgencio Batista, al que acusaban de autoritario y corrupto.
Pero a pesar del gran apoyo popular, muchos otros cubanos no compartieron las ideas revolucionarias de Castro y se exiliaron.
El ataque a Bahía de Cochinos de 1961, sin embargo, estuvo condenado al fracaso antes del primer disparo. Y la Brigada aún responsabiliza a Washington.
Desde la Casa Blanca, el presidente John Fitzgerald Kennedy canceló a última hora los ataques aéreos que iban a neutralizar la aviación castrista.
Lo hizo porque EE.UU. no podía figurar como impulsor de la invasión. Eso no solo perjudicaba su imagen internacional, sino que daba excusas a la Unión Soviética, que entonces se afianzaba como socio clave de Castro, para responder y provocar un conflicto nuclear sin precedentes.

Así, los decididos pero también inexpertos jóvenes que soñaban con “liberar a Cuba del castrismo” aguantaron menos de 72 horas.
Desembarcaron en la madrugada del 17 de abril de 1961. En la tarde del 19 ya estaban derrotados.
Los sobrevivientes de la Brigada 2506 fueron liberados tras intensas negociaciones en la Navidad de 1962, un año y medio después.
Los brigadistas que aún quedan vivos siguen esperando en el exilio por la caída del gobierno socialista cubano.
Mientras, Cuba festeja cada 19 de abril cómo una pequeña nación derrotó a un ejército de “mercenarios” financiado por el país más poderoso del mundo.
José Carlos Cueto
Foto: BBC, Internet
Vía: BBC News Mundo